Caliente y recién salido de nuestro horno de pellets.
Galletas de avena, muffins, tartaletas de frutas, empanada de manzana…
Calabaza, espelta, integral, lino, chía, sin sal.
‘Noso pan de millo’ el de toda la vida.
Rollos de canela, cruasanes, tostadas, bizcochos.
De xoubas, de pulpo, de choco, de raxo… (depende de la temporada)
DAVID RICHO
El concepto de <<pan saludable>> nace y se desarrolla progresivamente como una necesidad de ofrecer argumentos, basados en la ciencia y en la experiencia milenaria, para contrarrestar una ofensiva mundial contra el gluten y el trigo. Asimismo, se desarrolla ya íntimamente ligado al gran número de investigaciones y artículos científicos publicados en la última década sobre la <<sourdough>> o masa madre de cultivo (MMC).
Desde hace pocos años, los denominados gluten-related disorders o enfermedades relacionadas con el gluten han sobrepasado el ámbito médico, entrando sin una lógica aparente en una nueva moda alimenticia. En países como Estados Unidos y Canadá, el consumo de artículos sin gluten se incrementa al albur de la publicidad y patrocinio de deportistas, artistas de cine y otros personajes mediáticos de manera cuasi exponencial. Esa nueva moda apoyada desde libros superventas, ya ha sido profusamente rebatida desde la Universidad de Saint Paul. Queda por contestar y demostrar que es posible ofrecer una alternativa nutricional y saludable panadera a esta tendencia.